Convertirnos en mejores seres humanos, es posible. Pero lastimosamente esto no ocurre por arte de magia, todo está en nuestras manos, en las ganas que tengamos de salir adelante, de ayudar a los demás, de agradar a Dios y de sentirnos mejor con nosotros mismos.
En esta lista encontrarás una obra diferente para cada día de la semana. Así es, de lunes a domingo podrás trabajar para ser mejor. Puedes intercalar las obras según tus necesidades, lo importante es que des el primer paso y empieces con alguna de ellas. Si no puedes cumplirlas, no desesperes, inténtalo de nuevo, nadie dijo que fuera fácil. ¡Mucha suerte!
1. Lunes: sonríe más
Puede que el lunes sea uno de los días más abrumadores para los que trabajan o estudian. Deseamos que el domingo sea eterno o que al menos dure más de 24 horas. Lo que puedes hacer este día es aceptar el reto de sonreír más. Puedes empezar desde que te despiertas, sonríele a tu esposa, a tus hijos, a tus padres, a tus compañeros de trabajo o estudio, a la persona que te vende el café o al señor del taxi. Seguro más de uno creerá que perdiste la cabeza. Pero aunque te cueste, ¡inténtalo!.
2. Martes: dile algo bonito a alguien
Dile algo lindo a tu pareja, a tus hijos, a tus amigos o a alguien de tu oficina. No tiene que ser nada complicado, simplemente piensa en qué es lo que te gusta de esa persona: ¿su generosidad?, ¿su alegría?, ¿su compañía?, ¿sus consejos? Puedes intentar decir: estoy orgulloso de ti, qué linda te ves hoy, qué bien te ves cuando sonríes, te extraño, me gusta estar a tu lado etc. Hay frases muy simples que pueden cambiarle por completo el ánimo a una persona.
3. Miércoles: abraza fuerte
Es verdad que no a todas las personas les gusta este tipo de contacto físico. Algunos se sienten incómodos, elige a una persona que quieras mucho este día y dale un buen abrazo, uno largo y fuerte. Uno que dure más de 10 segundos, los abrazos también reconfortan el alma.
4. Jueves: ofrécete a hacer algo que no te guste
Este es un sacrificio, un verdadero sacrificio que luego te hará sentir mejor. Hay muchas cosas que nos dan pereza, que preferimos evitar o que simplemente detestamos. Puedes empezar con algo pequeño, como por ejemplo lavar los platos, ofrecerte a llevar a un amigo a casa, explicarle por enésima vez a tu papá cómo usar un filtro, sacar a pasear al perro, barrer la casa o cambiar el pañal de tu hijo. Seguro te lo agradecerán.
5. Viernes: envía un mensaje lindo
Envíale un mensaje lindo a alguien. Puede ser a un amigo con el que no hables hace mucho, a tus padres o a tu pareja. Con lindo no me refiero a: “te quiero, nunca cambies”. Esfuérzate un poco más, dile algo que de verdad te cueste o que sepas que lo hará feliz. Un mensaje que ocupe más de cuatro líneas y que pueda sacarle una sonrisa a esa persona que quieres.
6. Sábado: ora por alguien que no te caiga bien
¿Qué? ¿Orar por alguien que me hace la vida imposible? Si, alguien que no te caiga bien, alguien que te colme la paciencia, alguien que te haga la vida cuadritos, alguien que nunca tenga nada positivo que decir. Puede ser ese jefe que te atormenta la vida, un compañero de trabajo amargado, un amigo que te haya traicionado o un vecino al que quisieras enviar por FedEx a la Conchinchina. Basta con que le digas a Dios: te pido por x persona para que cambie, para que reflexione o para que algún día te conozca.
7. Domingo: agradece todo lo que más puedas
Empieza desde el momento en que abres los ojos. Siéntete agradecido porque tienes un nuevo día de vida, porque gozas de buena salud, porque tienes qué comer, porque tienes con qué abrigarte. Porque tienes un hogar, una familia, una casa, un carro, un trabajo etc. Intenta ser consciente de todo lo que tienes a lo largo del día. Este es un ejercicio que podría hacerse a diario.
Cuéntanos cuál de estas obras crees que te costará más trabajo realizar y qué otras sumarías a la lista?
Fuente: Catholic-link
Comentarios
Publicar un comentario